21 de febrero 2021

Evangelio de Mateo, capìtulo 4, 1-11

 

Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo. Y después de hacer un ayuno de cuarenta días y cuarenta noches, al fin sintió hambre. Y acercándose el tentador, le dijo: «Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes.» Mas él respondió: «Está escrito: = No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.» = Entonces el diablo le lleva consigo a la Ciudad Santa, le pone sobre el alero del Templo, y le dice: «Si eres Hijo de Dios, tírate abajo, porque está escrito: = A sus ángeles te encomendará, y en sus manos te llevarán, para que no tropiece tu pie en piedra alguna.» = Jesús le dijo: «También está escrito: = No tentarás al Señor tu Dios.» = Todavía le lleva consigo el diablo a un monte muy alto, le muestra todos los reinos del mundo y su gloria, y le dice: «Todo esto te daré si postrándote me adoras.» Dícele entonces Jesús: «Apártate, Satanás, porque está escrito: = Al Señor tu Dios adorarás, y sólo a él darás culto.» = Entonces el diablo le deja. Y he aquí que se acercaron unos ángeles y le servían.